Deporte y ciudadanía

Con la práctica deportiva, la LBV promueve la inclusión social de niños y jóvenes de comunidades vulnerables.

Mariane de Oliveira Luz

04/11/2016 | Viernes | 10:17 horas | Actualizado el 04/11 a las 11:06 horas

En una reciente investigación divulgada por la Organización Mundial de la Salud (OMS), se detectó la necesidad de considerar la importancia de la actividad física y percibir la suma de beneficios que la práctica deportiva puede proporcionar a las personas si se hace de modo regular y con la debida orientación profesional. De acuerdo con el estudio, 5,3 millones de personas en todo el mundo mueren por año de enfermedades asociadas a la inactividad física. El problema es serio y merece la atención de los organismos públicos competentes y de la sociedad.

Aliado del aprendizaje

Que el deporte ayuda a mantener el bienestar y la autoestima de quien lo practica y que contribuye a una vida saludable ya se sabe. Ahora, ¿qué puede hacer el deporte, cuando es bien utilizado, en el contexto escolar y comunitario? Los educadores de deporte coinciden en que la práctica deportiva puede potencializar el aprendizaje de niños y adolescentes. Debido a que, además de trabajar su cuerpo y mejorar su disciplina, su concentración, su agilidad y su coordinación motora, los estimula a sentir consideración por los semejantes, la solidaridad y la actividad en equipo, imprescindibles para la promoción de la Cultura de Paz. “Aprender [un deporte] implica planificar, experimentar, decidir, relacionarse con las otras personas (...). Al interactuar con ellas mediante un juego sencillo, aprendemos diversos valores que llevamos a nuestra vida, entre ellos el respeto a las reglas y al prójimo, en general uno de los más exigidos en el medio deportivo”, afima el educador físico del Centro Comunitario de Asistencia Social de la Legión de la Buena Voluntad (LBV) en Santos, Brasil, João Fragoso.

Daniel Trevisan

En la LBV el deporte es un gran aliado del proceso de enseñanza y aprendizaje. Para que se tenga noción del alcance que la actividad física tiene en el área, cabe destacar que buena parte de las 42 modalidades que fueron disputadas en las Olimpiadas Rio 2016, es practicada por los atendidos en la Institución. Esa iniciativa es pautada por la campaña pionera de la Entidad ¡Deporte es Vida, no violencia! Siguiendo ese lema, asociar el deporte a los contenidos aplicados en las clases y en actividades —ambos con la particularidad de la Espiritualidad Ecuménica— se han producido resultados cada vez mejores dentro y fuera de los estadios, de las canchas y de los gimnasios, como trataremos en este reportaje.

Formando campeones

El bádminton es aún poco conocido en Brasil, si se compara con otras modalidades deportivas, pero en dos unidades de la LBV es “el preferido” de los niños y jóvenes. Para muchos, puede parecer un juego sencillo de raqueta con volante, semejante al tenis, pero, además de divertir, ayuda a desarrollar la concentración y la coordinación motora de quien lo practica. Los atendidos en los Centros Comunitarios de Asistencia Social de la Institución en la ciudad de Aracaju, capital del Estado de Sergipe y en la ciudad de Rio de Janeiro, capital del Estado de Rio de Janeiro, ¡que lo digan! 

Jean Carlos
Taislaine Lima: “El bádminton modifió mi vida y es muy importante para mí. Me siento alegre cuando estoy jugando. Antes, yo sufría bullying; las personas me llamaban gorda por mi silueta más fuerte, pero, después que empecé a practicar el bádminton, empezaron a verme como una campeona. (...) Mi comportamiento en casa y en la escuela cambió también, porque, en el bádminton, aprendemos a ser educados, a respetar a los padres, a estar tranquilos en la escuela, porque existe el momento de jugar y el de aprender”.

En Aracaju, la dedicación de los niños a este deporte, en los talleres de actividades deportivas, generó resultados impresionantes desde que la modalidad se practica en el lugar, un año y cinco meses. La participación de la delegación de la Entidad en el Campeonato Norte y Nordeste de Bádminton es un ejemplo, porque las pequeñas atletas Maria Eduarda, de 11 años, y Taislaine Rodrigues Lima, de 14 años, forman parte de la Selección Sergipana y llegaron a los lugares más altos del podio, conquistando medallas de oro y de plata, respectivamente.

Priscilla Antunes
Clases de bádminton en la LBV.

Conocimiento compartido

Concentración, estrategia y razonamiento lógico son habilidades importantes para el ejercicio de casi todos los deportes, pero, en el caso del ajedrez, son prerrequisitos para alcanzar el éxito en esa modalidad. Aunque todavía no integre el rol de los deportes olímpicos —aunque este sea el deseo de miles de personas que lo practican en todo el mundo—, el ajedrez es también muy utilizado en los ambientes escolares como recurso para ayudar a estimular una serie de capacidades en los educandos y hacer la asimilación de los contenidos más natural y placentera. 

Letícia Teixeira

En la LBV de Uruguay, la modalidad es una herramienta de gran relevancia en el proceso de aprendizaje, que se enseña a las niñas y a los niños con edades a partir de los 5 años que frecuentan el Jardín Infantil Jesús, ubicado en Montevideo. Los instructores de esos estudiantes son los alumnos de más edad atendidos por la Institución en el programa Niño: ¡Futuro en el Presente!, que les trasmiten a ellos todo el conocimiento obtenido sobre el deporte.

Letícia Teixeira
Martín Coitiño: “Me gusta mucho venir a la LBV. Aquí estudiamos, cantamos, jugamos, hacemos teatro y aprendemos valores. (...) Es bueno aprender ajedrez aquí y enseñarlo a los niños de 5 años. A ellos les gusta jugar y se concentran bien durante los partidos, que nos ayudan a pensar y a ser más inteligentes. El ajedrez nos une como compañeros, porque crea una competitividad saludable entre nosotros y compartimos un momento de concentración”.
 

Aprendizaje para la vida

Reconocida desde el siglo XX como deporte, la capoeira conquistó el interés de más de ocho millones de personas y se practica en más de 160 países. Consciente de su valor en el futuro de las nuevas generaciones, la LBV de Argentina emprende, hace más de diez años, en alianza con la Asociación Argentina de Capoeira, un proyecto que da la posibilidad a los niños y adolescentes atendidos por ella, de aprender esa modalidad. Durante las dos horas en las que ésta se realiza, los sábados, los niños conocen, además de las técnicas del deporte, los valores indispensables para vivir bien en sociedad.

Carlos César Da Silva
Adriano Vera Díaz (7 años): “Vi a algunos niños haciendo capoeira y me animé. Me gustan los movimientos. Me emocioné practicando capoeira y empecé a sentirme mejor desde entonces”.

En 2015, el proyecto tuvo un momento especial: 14 niñas y niños atendidos por la Entidad fueron bautizados en la capoeira, arte marcial de ataque y defensa de origen 100% brasileño. El coordinador del Espacio Educativo Calle Colores, de la LB en aquel país, José Pardo, explica que la modalidad no solamente trabaja todo el cuerpo y genera mucha energía, como también ayuda a promover el intercambio de valores y desarrolla la disciplina en los practicantes. Según el representante de la Institución, el ejercicio de este deporte también ayuda a los niños que participan en el programa, que están en situación de vulnerabilidad social, a superar diversas limitaciones y desafíos. “Ellos han mejorado el comportamiento y están más estimulados en la escuela, lo que se reflja en su autoestima. Además, han mejorado la capacidad de expresión y han demostrado gran capacidad para resolver sus conflctos”, resalta.