El mundo cada vez más grisáceo

La LBV propicia calidad de vida y valoriza la experiencia de los ancianos.

de la Redacción

13/02/2015 | Viernes | 17:20 horas | Actualizado el 22/09 a las 17:16 horas

En las últimas décadas, el número de ancianos en el mundo ha ido creciendo gradualmente. Varios fueron los factores que dieron oportunidad a ese cambio: los avances de la Ciencia y la mejora del acceso al agua tratada, entre otros. Datos del informe Envejecimiento de la Población Mundial: 1950-2050, producido en 2009 por la División de Población del Departamento de las Naciones Unidas para Asuntos Económicos y Sociales (DESA, siglas en inglés), muestran que el proceso de envejecimiento aumentará más rápido que ningún otro segmento de la población global, hasta el 2050. 

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En otro documento, sobre el Estado de la Población Mundial 2011, producido por la División de Información y Relaciones Externas del Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA), el desafío es reconocidamente grande en los países en los que la longevidad es alta, aunque también sea sentido en lugares de renta media y baja, en que se “están aumentando lentamente los porcentajes de población de más de 60 años, de más de 70 años, e incluso en algunos casos, de más de 80 años”.

Ante esta perspectiva, se vuelve imprescindible invertir en la calidad de vida de la Tercera Edad (o jóvenes de la Mejor Edad). Por esto, la Legión de la Buena Voluntad, desde hace décadas, proporciona apoyo a los abuelos y abuelas en situación de vulnerabilidad social, por medio de programas que trabajan las capacidades cognitivas y físicas, y el diálogo, con vistas a mejorar la autoestima y el bienestar de estos ciudadanos, para un envejecimiento activo y saludable. Las actividades tienen función proactiva y preventiva, con el objetivo de reintegrar a esos ancianos, para que puedan enfrentar las dificultades propias de la edad, manteniendo en buena forma cuerpos y espíritus.

Un ejemplo de estas actividades se ve en la Legión de la Buena Voluntad de Portugal, que desarrolla su trabajo hace 25 años. En este país las personas con más de 60 años son cerca del 20% de la población y, en 2050, ese porcentaje debe llegar al 38%, es decir, casi cuatro millones de ancianos. Con el programa ¡Viva Más!, la LBV de Portugal proporciona a la Tercera Edad actividades como gimnasia y artesanía, sesiones de belleza, paseos y conferencias, y trabajo voluntario. En este último, ellos ayudan en la preparación y distribución de alimentos y confeccionan ropa para los atendidos por el programa Ciudadano Bebé

Maria Isabel Garcia, de 60 años, participa hace cuatro años en ese programa, en la ciudad de Porto, y vio su vida transformada: “Estaba con depresión, entonces, pedí ayuda aquí y me invitaron al ¡Viva Más! Entré y estoy contenta; me gusta tener compañía y estar apoyando a los otros”.

Ella se divide en las variadas actividades ofrecidas por la Institución, lo que le dio a Maria otra perspectiva en su quehacer diario: “Hago gimnasia, [aprendo] música, (...) preparo sopa para la Ronda de la Caridad y me gusta mucho lidiar con los niños, en la entrega del ajuar de los bebés. Me siento feliz en la Legión de la Buena Voluntad”.

Del Norte al Sur de Brasil

En suelo brasileño, el escenario sigue la misma tendencia: el 11% de la población tiene más de 60 años y este porcentaje aumentará en las próximas décadas. La LBV, que mantiene su trabajo en el país desde 1950, promueve acciones específicas para este grupo etario.

En los Centros Comunitarios de Asistencia Social, la acción se realiza por medio del programa Vida Plena, del norte al sur de Brasil. La Legión de la Buena Voluntad también tiene Hogares de Ancianos en Uberlândia y Teófilo Otoni, en el Estado de Minas Gerais, y en Volta Redonda, en Rio de Janeiro. En los hogares, los acogidos reciben tratamiento y atención 24 horas por día, en Volta Redonda, además del régimen de residencia permanente, existe también la modalidad Centro-Día, en la que los abuelos y abuelas se quedan en el hogar mañana y tarde, de lunes a viernes, y, después, vuelven para sus casas a pasar la noche y el fin de semana con sus familiares.

Las actividades en los Hogares y Centros Comunitarios incluyen gimnasia, artesanía, conferencias y paseos, además de baile, todas acompañadas por profesionales de la Institución, con el objetivo de fortalecer la ciudadanía y garantizar los derechos de la Tercera Edad. 

Unidades de amparo de la LBV

Hogar Alziro Zarur, en Teófilo Otoni/Minas Gerais, Brasil — en más de medio siglo de actuación, se destacó por la dedicación al amparo de la Tercera Edad, especialmente al anciano apartado de la convivencia familiar y/o en situación de vulnerabilidad. El residente Joaquim Lacerda, de 84 años, tiene una relación muy afectiva con el lugar y con las personas: “Yo vivo aquí hace más de 20 años. Este es mi hogar y todos aquí son mi familia. Es un lugar muy bueno, todos nos tratan con mucho cariño”.

Hogar Alziro Zarur, en Uberlândia/Minas Gerais, Brasil — inaugurado en 1961, también tiene el régimen de residencia permanente. Allí los jóvenes de la Mejor Edad reciben el cuidado y el apoyo necesarios para que tengan una vida saludable y participativa. Para esto, cuentan con alimentación balanceada, asistencia médica y atención social, además de participar en actividades recreativas y físicas frecuentes, de acuerdo con la necesidad del atendido.

Hogar Abuela Ássima y Abuelo Elias Zarur, en Volta Redonda/Rio de Janeiro, Brasil — es el más antiguo de los hogares, fundado en 1957. En él se implementó la modalidad Centro-Día. Además del ambiente acogedor, se destaca por la calidad del servicio y la accesibilidad. Las salas de servicio social y de terapia ocupacional tienen revestimiento, piso antideslizante y puertas anchas para facilitar el acceso de quienes tienen dificultades motoras y usan silla de ruedas.

Terapia ocupacional

Los programas de la Legión de la Buena Voluntad tienen el objetivo de proporcionar el bienestar físico, psicológico y emocional a la Tercera Edad. Por esto, la LBV invierte en la terapia ocupacional, que promueve la autonomía a las personas con alteraciones motoras, sociales o emocionales. Entre las actividades están la pintura, el collage y la artesanía, para que ellos se sientan útiles y productivos.

“No creo en la vejez como sinónimo de derrota. Viejo es aquel que se desanimó, perdió el Ideal. Seamos siempre jóvenes, a cualquier edad.” Paiva Netto, director-presidente de la LBV.